sábado, 9 de abril de 2011

Arsenal empató en el final y dejó a Quilmes sin consuelo

Quilmes cosechó un punto con gusto muy amargo tras empatar 2-2 con Arsenal en Sarandí, luego de haber estado dos veces en ventaja y sufrir la igualdad definitiva en el primer minuto de descuento. El conjunto de Ricardo Caruso Lombardi no pudo ganar por primera vez y continúa último en la tabla de promedios, mientras que su rival llegó a cinco partidos sin ganar.

Los protagonistas presentaron esquemas similares en el inicio. Ambos emplearon dos líneas de cuatro, pero en los últimos metros se diferenciaron. Quilmes apostó por Caneo como enlace y por el debutante Vázquez como ariete, mientras que Arsenal repitió el tándem Leguizamón-Obolo. El arranque estuvo plagado de fricción, lucha y despliegue.

Paulatinamente, el Cervecero tomó las riendas en base a su elogiable ímpetu y Arsenal aceptó jugar de contragolpe. El visitante orientó sus ataques por derecha, donde combinaron Torres, Caneo y Garnier. Por su parte, todos los intentos ofensivos del equipo de Alfaro se basaron en las jugadas individuales de Leguizamón. Era difícil imaginar goles en la tarde.

Tras los 25 minutos, la modorra se disipó. Arsenal lo tuvo con Caffa, pero su remate fue interceptado por Martínez. Y a los 26 llegó el gol de Quilmes: Torres envió un centro por derecha y Vázquez conectó de cabeza. El mismo delantero casi amplía a los 35. En tanto, el Arse dispuso de otra chance con Leguizamón, que recibió un gran pase de Marcone y disparó al palo.

El complemento arrancó con mayor intensidad que el primero y en 15 minutos hubo cuatro chances claras para marcar. A los 2, Garnier se animó desde lejos y la pelota salió cerca del palo. A su vez, Obolo recibió un pase de Aguirre y definió muy mal en el mano a mano con Trípodi. Y más tarde, Campestrini fue verdugo de Vázquez y Caneo.

Paulatinamente, Quilmes resignó ambición y Arsenal empezó a arrimarse hacia Trípodi. Sin demasiadas ideas, el local se adelantó y encontró el empate a los 27 mediante un cabezazo de Lisandro López, tras un córner desde la izquierda. Con el ingreso de Alustiza, Arsenal se tornó más filoso y coqueteó con el segundo a merced de un Quilmes desesperado.

El Cervecero sacó un as de espadas a los 38 y se desahogó. Caneo se escapó por izquierda y tocó para Vázquez, que definió mordido y la pelota rebotó en un defensor. Justo a tiempo llegó Garnier para no perdonar frente al arco. Parecía el fin de la mufa. Pero en el primer minuto de descuento todo se derrumbó: Obolo la peinó, Leguizamón definió cruzado y Caruso estalló de bronca. El futuro de Quilmes en Primera ya parece sentenciado.

Fuente: TyC sports

0 comentarios:

Blogger template 'PlainFish' by Ourblogtemplates.com 2008